En esta época, con las condiciones climatológicas adversas, el uso de neumáticos de invierno para condiciones extremas de frío y nevadas se incrementa entre los usuarios diarios de vehículos. Sin embargo, muchos aún presentan temor o desconfían de estas gomas pese a que se ha ido popularizando tanto en España como en muchos países de la región, los cuales han puesto como obligatorio su uso.
Neumáticos de invierno composición y disposición
La primer consulta al momento de tener que inclinarse por un neumático para uso en invierno es la composición del mismo, pensando en las diferencias que puede tener con una goma normal. La clave de la composición es evitar el endurecimiento que se da en un neumático cotidiano al bajar los siete grados, esto genera que se pierda adherencia. Un incremento de sílice hace que la goma sea más flexible y se adhiera aun en terrenos deslizantes.
Otra de las dudas cuando llega la hora de adquirir un neumático para andar en suelos nevados es si se encuentra disponible para todos los modelos de vehículos. Los fabricantes de gomas han venido desarrollando diversos modelos de neumáticos para que cada vez más coches puedan contar con ellos durante el invierno.
El diseño
Este tipo de neumáticos fabricados para usar en invierno tiene una banda de rodadura más recortada y profunda, de esa manera se consigue evacuar más agua en caso de lluvias. También vienen con laminillas en forma de zigzag, generalmente entre seis u ocho, para posibilitar una mejor adherencia al hielo y la nieve.
Frenado
Los fabricantes han facilitado datos de estudios realizados por ellos que indican que frenar a 80 km/h sobre suelo mojado tiene una diferencia de frenado de algo más de 6 metros. En caso de circular sobre nieve y rodando a 50 km/h, la diferencia de frenada se dispara a 30 metros. También se ha estudiado que la adherencia de estos neumático en curva sobre un pavimento deslizante, es mucho mayor, dando una estabilidad clave en momentos decisivos.
Ventajas sobre el uso de cadenas
La primera que surge es tener que llevar adelante la tarea de colocar las cadenas al tener que conducir en temperaturas extremas. Además, una vez pasada el área nevada se deben quitar las cadenas y quizás se deban volver a colocar en caso de encontrar otra zona helada. Los neumáticos de invierno también evitan que con la colocación de las cadenas pueda dañarse el coche.
Cadenas como una ayuda
Los neumáticos marcados con la sigla “M+S” ya son una alternativa a las cadenas, por lo cual no sería necesario la colocación de las mismas. Además, si la goma incluye el símbolo “3PMSF”, quiere decir que están homologados para estas condiciones extremas.