Si tu vehículo ha dejado de funcionar y has descubierto que el motor es el problema, es posible que tengas un motor gripado.
Aquí te contaremos qué es, por qué ocurre y cuáles son sus posibles soluciones.
¿Qué es un motor gripado?
Un motor gripado es el producto de diferentes tipos de avería. Lo más común es aquella provocada por una falla en el sistema de refrigeración o falta de lubricación del coche.
Aunque este es un problema muy común, no en todos los casos es reparable. Y en el caso de que tenga solución, su coste suele ser elevado.
Sin embargo, si decides repararlo, lo primero que necesitarás es un diagnóstico. Con esto, podrás comprobar cuál es la avería específica que ocasionó el daño al motor.
Causas de un motor gripado
La principal causa de tener un motor gripado es el déficit de lubricación.
Esta situación se presenta debido al desgaste que produce el roce de los componentes de metal que constituyen el motor, así como las temperaturas elevadas que este genera.
Por otra parte, también es perjudicial la falta de control en los niveles de aceite, el mal funcionamiento de los sistemas de refrigeración o un nivel muy bajo de agua en el motor.
Todas estas complicaciones sobrecalientan y deterioran los elementos de un motor a gasolina.
También puede existir una abertura en la cubierta de lubricante del segmento de compresión. La fricción entre las piezas hace que éstas se desgasten.
De igual manera, el desequilibrio en el cigüeñal puede ser desfavorable. Esto se debe a que una parte del pistón estará más consumida de lo usual.
En un motor gripado, las piezas que pueden salir perjudicadas son los elementos que constituyen el propulsor.
Estos pueden ser los cilindros, la culata, los rodamientos, los pistones, el cigüeñal, el árbol de levas, entre otros.
Cómo reparar un motor gripado
Dado que un motor gripado puede tener fallas en cualquiera de sus piezas, para repararlo debe sacarse del vehículo y desarmarlo.
Si se desea examinar el cilindro y el pistón, se procederá una vez el motor alcance una temperatura manipulable, es decir, cuando éste se haya enfriado.
De igual manera, es necesario extraer todo su líquido de refrigeración, así como también desconectar su escape, el termostato y la bujía para continuar con la reparación.
Asimismo, se deben quitar las juntas si se amerita alzar algún cilindro. Esto permitirá ver en qué condición se encuentran las piezas antes de reemplazarlas.
El paso siguiente es la extracción del bulón con algunas herramientas para sacar de él tanto la jaula de agujas como el pistón.
Al terminar, todo vuelve a cubrirse de aceite para devolverse a su sitio de manera cuidadosa.
Por otro lado, al examinar los rodamientos, el proceso incluye extraer la biela y el pistón. A todo ello, se suma quitarlos también del cigüeñal, aunque si este está muy deteriorado, la mejor opción es reemplazarlo por completo.
Como verás, todo el proceso es muy complejo y, por eso, el diagnóstico es vital. Este dictará cuáles son los elementos del motor deben ser sustituidos para optimizar su vida útil.
Por supuesto, al momento de reensamblar el motor, todos sus componentes deben tener la lubricación adecuada. Este procedimiento garantiza una mayor funcionalidad.
De igual forma, este proceso debe hacerse con una precisión lo más exacta posible para evitar roces y desgastes que repitan la avería.
Una recomendación importante es que realices un cambio de la junta de la culata. Esto se debe a que la apertura del motor produce una deformación, restando parte de su compresión inicial.
Reemplazar las piezas averiadas de la junta de la culata no tiene un costo muy elevado. El mismo se ubica entre los 100 y los 200 euros, una inversión inteligente en lugar de pagar un arreglo por todo el motor si llega a dañarse.
Y es que reparar un motor gripado es un procedimiento que consta de pasos muy delicados.
El mecánico comenzará por zafar tuercas, retirar el chicote, cables, el carburador y otros elementos hasta finalmente retirar la junta de la culata.
De no repararse correctamente o seguir todos los pasos que te hemos explicado, el motor podría terminar gripado de nuevo y habrás perdido todo el esfuerzo realizado (y el coste de la reparación inicial).
¿Cuánto cuesta reparar un motor?
Te preguntarás cuánto vale la reparación de un motor gripado.
La respuesta es sencilla, el precio va a depender de la clase de vehículo que tengas, sus prestaciones y, por supuesto, de lo afectado que esté el motor y su grado de avería.
A este coste se suma, como es lógico, la mano de obra del taller, el arreglo en sí y las acciones que sean necesarias durante el proceso de reparación.
¿Qué puedes hacer si tu motor no tiene arreglo?
Otra alternativa que tienes en caso de que, como te comentamos al principio, la avería sea irreparable, es adquirir un motor reconstruido.
Los precios de los motores reconstruidos se ubican alrededor de los 1500 euros y los 1700 euros.
Sin embargo, ten en cuenta que estos costes dependerán de la gama en la que califica tu vehículo. Asimismo, también influirán los cilindros que quieres obtener.
En este sentido, para que tu compra sea lo más provechosa posible, presta atención a los detalles.
Lo primero que debes hacer es conocer de dónde proviene el motor reconstruido, y si llegó por motivos de daño o desuso.
Por otra parte, verifica cuál es su kilometraje. Comprueba que coincida con el modelo y el año de tu vehículo o, en su defecto, que sea compatible con él.
De igual forma, trata, en la medida de lo posible, que te ofrezcan una garantía por la funcionalidad del motor que estás adquiriendo.
Por ello, debes hacer la compra en un taller profesional.
En resumen, está muy pendiente de su aspecto. La presencia de aberturas o abolladuras y sus soportes son características de vital importancia
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